Reflexiones sobre mi Consciencia

Practicar el Perdón

Practicar el perdón es una de las tareas importantes en nuestra vida!
En público se perdona solo a los políticos, pueden realizar sus ideas más disparatadas y casi siempre se les perdona y no pasa nada!
Eso solo es anecdótico!
No perdonar, nos deja una vía bloqueada, pendiente de resolver!
Lo que no nos deja vivir en harmonía es la rabia, el miedo, el odio, la tristeza, el desengaño, la envidia, la autocompasión o el rencor! La vida nos trae problemas y cuando se crean esos sentimientos, daña nuestros emociones y este daño debe arreglarse, si o si! En la vida real nos hacen o hacemos daño y el que sufre el daño se queda con el sufrimiento, mientras el que lo causó, lo justifica de alguna manera, equivocadamente o no, con el resultado que se puede olvidar del asunto y no lo sufre!
Así, si este daño se perpetua nos hace sufrir siempre en cuando algo nos recuerda a este problema en cuestión y para arreglar eso hay que perdonar!
¿Por qué? Por amor propio, en primer lugar estamos nosotros y lo hacemos para nosotros, para no cargar con una herida que alguien nos causó en algún momento! Le perdonamos, no porque se lo merece, sino, porque con este gesto podemos curar el daño que nos ha hecho y si no se lo merece, no se lo comunicamos, es solo para nosotros!
Suena muy bien, a que si! Es complejo pero posible, hay que ir practicándolo, en un principio con cosas más leves, para adquirir el hábito de hacerlo. Todo eso para encontrar un equilibrio emocional y sano, hay que practicarlo siempre y no solo con los demás. Hay que perdonar conscientemente a cada uno que nos hico daño pero también a nosotros mismos. Es muy importante reflexionar sobre este tema porque nos proporciona estabilidad emocional!!!
Solo por tomar consciencia de la necesidad del perdón, ya tienes media batalla ganada pero como siempre en la vida, sin la acción no hay resultados!
En primer lugar tenemos que dejar de juzgar, ni suponer, son los dos actitudes con que justificamos nuestro comportamiento! Hay que analizar los hechos, buscar la interpretación justa y dividir entre lo que hemos causado nosotros mismos y lo que viene de otros. Muchas veces culpamos a otros para no afrontar nuestro propio problema, por ello hay que ser honesto en este análisis, una vez empezado nos damos cuenta por donde hemos fallado. Equivocarse es natural, nadie se libra de eso y por ello puede que sea difícil al principio pero no nos tenemos que escondernos de nadie, es un trabajo que hacemos en la intimidad y no tenemos que hacerlo público. Simplemente pasar revista de nuestra vida y reconocer los hechos y sus intenciones verdaderos. Con los demás no habrá demasiadas problemas, donde podemos ser engañados es con nuestros propios errores, siempre supimos taparlos y nos lo creíamos. Haber llegado a este punto, perdonarnos por los errores que hemos cometido, será más fácil perdonar y perdonar a las personas que nos han hecho daño o han sufrido consecuencias por culpa de nuestra metedura de pata, aunque haya pasado mucho tiempo. Muchas veces justificamos nuestro comportamiento con la actitud de la otra persona. Es un comodín que crea injusticias, como la otra persona se ha equivocado nos tomamos el derecho de actuar injustamente. La persona noble no permite eso, aunque la otra persona actúa equivocadamente, nosotros tenemos la obligación moral de respetar nuestros principios.
No es necesario personalizarse ante la persona, aunque aumentaría mucho su eficacia, y en algunos casos no es viable e incluso puede que la persona ya no vive entre nosotros. Es la actitud sincera que vale aquí, al reconocer el error, rectificar y perdonar cambia algo muy importante en nosotros. Al reconocer al error del otro o nuestro podemos acabar con los posibles secuelas acarreados desde hace mucho tiempo. Nos ayuda crecer como persona y nos ayuda a equivocarnos menos que antes.
A veces puede ser necesario apartar personas de nuestra viada, es por su carácter, nos harían daño una y otra vez, estamos en todo nuestro derecho de alejarnos. Nosotros ya les hemos perdonado pero el problema está en su comportamiento y si no toman consciencia de ello y no lo arreglan, vivirán el resto de su vida con este defecto.

Hay ayudas y técnicas para conseguir…